El asfalto, también conocido como alquitrán de hulla, es un material viscoso y pegajoso que se utiliza comúnmente en la construcción de carreteras, pavimentación de calles, pistas de aeropuertos, entre otros usos. Se obtiene mediante la destilación del petróleo crudo y se compone principalmente de betún, que es un compuesto orgánico pegajoso.
El asfalto se aplica en capas sobre la superficie de la carretera o la base de pavimento existente. Proporciona una superficie lisa y resistente al agua que protege la carretera de los daños causados por la intemperie y el tráfico vehicular. Además, el asfalto puede mezclarse con agregados pétreos para formar el asfalto caliente utilizado en la construcción de carreteras.
El asfalto también es conocido por su capacidad de autorreparación en cierta medida debido a su naturaleza viscoelástica, que puede ayudar a cerrar grietas menores que se forman con el tiempo debido al uso y la exposición a los elementos. Además, es un material reciclable, lo que lo convierte en una opción sostenible para la construcción de carreteras.
